
¿Puede alguien encontrarme alguien a quién amar? Cada mañana que me levanto me muero un poco. Apenas puedo quedarme de pie, pégate una mirada en el espejo y llora. Señor ¿qué me está haciendo? Pasé todos mis años creyendo en ti. Pero simplemente no obtengo ayuda. Trabajo duro cada día de mi vida. Trabajo hasta que los huesos me duelen. Llevo a mi casa mi paga duramente conseguida, toda para mí. Me pongo de rodillas y comienzo a rezar hasta que me salen lágrimas de los ojos. Pero todos quieren humillarme. Dicen que me estoy volviendo loco. Dicen que tengo un montón de agua en el cerebro. Que no tengo sentido común. No tengo a nadie en quién creer. No tengo tacto, no tengo ritmo. Todo el tiempo pierdo el compás. No voy a enfrentar una derrota. Tengo que salir de esta jaula, de la prisión. Algún día seré libre. Encuéntrenme alguien a quién amar.